Tan simple como alguien que este ahí sin dudarlo, pero tampoco dándolo por echo.Que te diga lo guapa que estas no de muy vez en cuando para no acostumbrarte. Hablar a todas horas y que después meses te siga sacando esa sonrisa tonta que se te pone cuando te piropea con cualquier tontería. Que te ponga de los nervios y que después vaya por detrás a darte un abrazo y susurrarte al oído que era broma. Tener pulseras como lazo de unión y un color en común que lo diga todo. El banco del parque como punto de encuentro. Que te saque de jaleos y te escuche tus tonterías por muy equivocada que estés o por poco que le interese. Que seas las razón por la cual un mal día pueda convertirse en no tan malo. Que empiecen a ser sus propios amigos los que te preguntan si sabes algo de el. Ir a saludarlo en una noche de fiesta, que te abrace, te de un beso y te diga 'te quiero'. Acompañarte a casa a las 4 de la mañana un viernes. Dejarlo dormido en el sofá y que se enfade porque no se pudo despedir de ti.